Blogia
LOBITO'S CLUB

Cultura general

El Árbol Genealógico

El Árbol Genealógico ¿Te has fijado en la forma de los árboles? En un árbol frondoso, de un solo tronco se desprenden muchas ramas de las que, a su vez, salen más ramas. Pues así como un árbol crece cada día y en cada temporada obtiene nuevas ramas y hojas y frutos, así tu familia ha crecido a lo largo del tiempo. Cada vez que tus papás o tus tíos o algún otro pariente tiene hijos, se ramifica el árbol de tu familia y se hace más grande y más grande y más grande... 

  Usando esta comparación entre los árboles y las familias se inventaron los árboles genealógicos, que son la historia del crecimiento de las familias representadas a través de un dibujo con forma de árbol.

El árbol genealógico es una representación gráfica que expone los datos genealógicos de un individuo en una forma organizada y sistemática, sea en forma de árbol o tabla. Puede ser ascendiente, es decir que expone los antepasados o ancestros de un sujeto o puede ser descendiente, es decir que expone todos los descendientes del sujeto. Para realizar un árbol genealógico es necesario, primeramente, haber realizado una investigación genealógica o genealogía del individuo.

Dependiendo de la finalidad o uso que quiera dársele al árbol genealógico, éste puede referirse sólo a la filiación y sucesión masculina, llamada también línea de sangre o linaje, o puede referirse a la filiación y sucesión femenina, llamada también línea de ombligo.

El árbol genealógico no se aplica solamente en seres humanos, también se utiliza para mostrar el pedigrí de un animal, representar la evolución de una lengua o idioma, seguir la trayectoria de un partido político, una disciplina artística o un arte marcial y ver sus ramificaciones.

Los Dibujos es la forma más antigua y fácil de representar una genealogía, con un árbol en cuyo tronco se indican los iniciadores o cabeza de una familia, la primera generación de hijos son las ramas gruesas que se separan del tronco, la segunda generación o nietos son ramas más pequeñas que salen de las ramas anteriores y así sucesivamente cada generación que va saliendo de una rama se representa por una rama más pequeña que la anterior.

Otro sistema se basa en el uso de fichas genealógicas, las cuales están numeradas y en ella se indican con números los fichas antecesoras y sucesoras. En cada ficha, dependiendo de su uso, se suelen indicar datos biográficos, antropométricos, biológicos o médicos del individuo. Estas fichas pueden ser administradas y consultadas físicamente o electrónicamente.

Te recomiendo que comiences con el tuyo, será divertido y algo trabajoso, podrás entablar nuevas amistades en su confección, aprenderás algo de historia y conocerás a mas familiares, tal vez algunos muy influyentes. Muchas sorpresas te esperan. Existen dos páginas que te pueden servir como ejemplo, las hizo un gran amigo hace un par de años, él está muy a gusto con sus descubrimientos y ahora quiere y valora mas a toda su familia: http://domingoelias.blogspot.com/ y http://www.gratisweb.com/carfelguevara/index.htm

Terremoto en Perú 7.9 de Ritcher

Terremoto en Perú 7.9 de Ritcher

 El 15 de agosto pasado el sur del Perú sufrió uno de los terremotos mas fuertes e intensos de su historia. Revisando la red encontre este hermoso artículo firmado por Rafa y de su página Ideas para vivir mejor he extraído estas líneas que me parecen muy oportunas en momentos como este.

"Es ahora, cuando hay que apoyar. No importa en el lugar que estemos, sea Perú, España, Argentina, México, etc. Hay distintas formas de dar. La mas fácil es dar dinero, sea mucho o poco, otra forma, quizá mas difícil es dar nuestro tiempo, es decir, dedicarle unas horas a ayudar, ya sea haciendo una actividad puntual u organizando a un grupo de gente para que lo haga, pero lo mas difícil es darse uno mismo, es decir, vivir de cara a los demás, con ese espíritu que nos impulsa a ayudar continuamente a los mas necesitados, no solamente dando lo que a uno le sobra en dinero o ropa usada, sino ver realmente que es lo que mas necesitan, a veces es nuestro tiempo, a veces necesitan alguien que los escuche, que los anime. Y sobre todo no hacerlo por un caso puntual, sino crearse uno mismo un estilo de vida orientado a eso, buscar algún sitio donde se pueda ayudar, una vez al mes, por ejemplo, en un hospital, un asilo, en un pueblo sin condiciones económicas para vivir, etc, todos tenemos al alcance de una llamada telefónica, distintas opciones, para eso, no hay pretextos. 

Pero aterrizando este artículo, como podemos ayudar? Los que vivimos en Perú la tenemos muy clara, porque hay campañas de donación de sangre, cuentas en todos los bancos, puntos de encuentro en los centros comerciales de recolección de frazadas. Ya cada uno sabe muy bien donde puede dejar su donación. Este artículo está dirigido mas bien a los extranjeros. Apelo a su colaboración. Acuérdense de que el mas beneficiado en esto es el que da y no el que recibe, porque el que da queda con una tranquilidad de conciencia que vale mucho mas de lo que da, y sabe bien que en la otra vida se le devolverá el ciento por uno, que negocio hay mejor que ese? 

Pues para ellos, estas alternativas muy concretas: Donación en el Banco de Crédito del Perú, cuenta: Dólares: 193-1586951-1-16, Soles: 193-1586582-0-79. Por otro lado la ONG Un Techo para mi País comenzará a partir de la próxima semana la construcción de viviendas de emergencia en las zonas afectadas. Para esta primera etapa, se edificarán 100 viviendas para la que requieren un mínimo de 300 voluntarios para el levantamiento de las casas, por los que aquellos que deseen inscribirse o brindar algún tipo de ayuda económica online pueden hacerlo escribiendo a emergencia@untechoparamipais.org.pe. Más información en www.untechoparamipais.org y al teléfono 441-3306.

Por último, para aquellos que no están en condiciones de hacer ninguna de las alternativas anteriores, hay algo muy fácil, rezar por las almas que se fueron, y por las que quedaron desamparadas. Si uno se acuerda de hacer esto todos los días por un mes, les aseguro que vale mas que un depósito de 100 mil dólares. Acuérdense que lo importante no es esta vida pasajera, en la cual no vale la pena anclarse, sino la eterna. " 

El Egoismo: enfermedad o sentimiento

El Egoismo: enfermedad o sentimiento

 Son clásicas las diferencias entre los opuestos: día-noche, bien-mal, etc. No obstante participar de un mismo origen (suelen ser dos extremos o polos de la misma cosa) son difícilmente reconciliables.

          Estamos acostumbrados a ver en los cuentos infantiles o en la televisión la separación entre el bueno y el malo, de forma que el bueno es incapaz de realizar cualquier acto propio de su contrario, y lo mismo ocurre con éste. Esta separación parece poco natural, y no es difícil entrever que el bueno y el malo son una misma cosa y que lo natural es que vayan unidos (esta tendencia a la unión puede observarse por el hecho de que existe una atracción entre ambos, que se traduce en una continua lucha, de forma que la existencia de uno se fundamenta en la existencia del otro).

          Si los opuestos existen en todos nosotros, lo siguiente que habrá que determinar es qué nos hace conducirnos de una manera o de otra. Para mí, el impulso que determina la relevancia en nuestro carácter de un polo u otro, es el egoismo. Este egoismo es difícil de definir, y ha sido denominado de diversas formas: "principio del placer", "principio o deseo de poder", etc.

El egoísmo suele verse más como un fenómeno del lado de los antivalores que del trastorno.

Decimos que el egoísta es indoloro, mezquino o miserable, pero nunca lo vemos como una posible patología; ¿acaso la gula no ha sido elevada (¿o devaluada?) al rango de "trastorno de la conducta alimentaría?".

Desde mi punto de vista, hay que considerarlo como una enfermedad del yo acaparador.

Además de un acto de mala educación, es un atentado a los derechos humanos, una violación del principio de la reciprocidad, una conducta depredadora, o si quiere, un patrón antisocial.

A veces la avidez es tan arraigada, es tan visceral, tan destructiva, que para modificarla se requiere la intervención psicológica o psiquiátrica.

No disculpo a los egoístas, sino afirmo que están aquejados de una enfermedad perversa.

Un hombre violador o golpeador, además de recibir sanción moral, debe ser atendido clínicamente.

En un conocido diccionario, Egoísmo se define como; "Inmoderado y excesivo amor que uno tiene por si mismo y que le hace tender desmedidamente a su propio interés", sufre de egocentrismo: "Soy el centro del universo".

El egocéntrico, inevitablemente, desconoce a todo interlocutor y destruye toda posibilidad de relación: "Sólo yo existo".

El inmoderado y excesivo amor por si mismo hace referencia de la egolatría, lo que se conoce como mecanismo o culto al ego.

El Ególatra desconoce la empatía.

No posee la capacidad de amar porque el amor propio le demanda todo su potencial afectivo.

Siguiendo las premisas de la ética de la consideración, la asertividad bien entendida trata de equilibrar el yo autónomo (independiente) con el yo considerado (interpersonal).

La combinación de ambos me permite comprometerme con la red social/afectiva a la cual pertenezco y sostener al mismo tiempo un territorio de reserva personal.

Laín Entralgo se refiere al momento coafectivo de la relación interpersonal, determinado por dos aspectos afectivos fundamentales, sin los cuales no puede existir ninguna relación: (a) la compasión (padecer íntimamente con el otro sus vivencias penosas) y (b) la congratulación (gozar íntimamente con el otro las vivencias gozosas).

¿Qué es ser egoísta?: Es renunciar a la condición humana, a lo coafectivo, es desconocer que somos prolongaciones de los demás.

Aunque a los egoístas no les guste, estamos conectados unos a otros por naturaleza, intercalados, apretados, casi abrazados, de tal manera que ignorar al prójimo es negarse a si mismo.

La carencia de amor, la ausencia de empatía y la indiferencia acaparadora son formas de agresión encubierta, violencia enfermiza que merece, además de repudio, ayuda profesional.

De no ser así, seríamos egoístas con los egoístas: una bola de nieve de enemistad aplastante.

La Solidaridad

La Solidaridad  

La solidaridad es uno de los principios básicos de la concepción cristiana de la organización social y política, y constituye el fin y el motivo primario del valor de la organización social. Su importancia es radical para el buen desarrollo de una doctrina social sana, y es de singular interés para el estudio del hombre en sociedad y de la sociedad misma.

Junto con los de autoridad, personalidad, subsidiaridad y bien común, la solidaridad es uno de los principios de la filosofía social. Se entiende por regla general que, sin estos cinco principios, la sociedad no funciona bien ni se encamina hacia su verdadero fin.

La verdadera solidaridad, aquella que está llamada a impulsar los verdaderos vientos de cambio que favorezcan el desarrollo de los individuos y las naciones, está fundada principalmente en la igualdad radical que une a todos los hombres. Esta igualdad es una derivación directa e innegable de la verdadera dignidad del ser humano, que pertenece a la realidad intrínseca de la persona, sin importar su raza, edad, sexo, credo, nacionalidad o partido.

Juan Pablo II lo expresa claramente. El ejercicio de la solidaridad dentro de cada sociedad es válido sólo cuando sus miembros se reconocen unos a otros como personas. Aquí el término persona aparece para llamar nuestra atención hacia un aspecto que es esencial dentro de un estudio bien encausado de la solidaridad. La solidaridad en el sentido que nosotros la entendemos existe sólo entre personas.

Se ha querido aplicar algunas veces la palabra solidaridad a la relación que puede existir, por ejemplo, entre un ser humano y un animal o, aún más ampliamente, entre un ser humano y su entorno ecológico. Nosotros no podemos concebir una solidaridad verdadera entre un humano y un animal, sino acaso una relación de mutua necesidad o de interdependencia; la misma que encontramos en el hombre que cuida la naturaleza; pero no podemos llamar a eso, de ninguna manera, solidaridad.

La solidaridad, esencialmente, debe ser dirigida al ser humano. La persona humana es principio y fin de la solidaridad. El acto solidario debe ser hecho en beneficio de una persona, ya sea directa o indirectamente. De esta manera, puedo verdaderamente ayudar a otras personas si favorezco el cuidado de un ecosistema, para que otros puedan disfrutar ordenadamente de sus beneficios. El ser humano puede servirse de todos los bienes naturales, de manera ordenada, para su beneficio. Desde este punto de vista, la naturaleza no puede ser para la solidaridad un fin, sino un medio. A fin de cuentas, el ser humano es quien debe recibir el bien, ya sea de manera directa o indirecta.

La solidaridad, ya lo hemos dicho, se enriquece y alcanza su plenitud cuando se le adhiere la virtud de la caridad, cuando se realiza por amor, cuando se convierte en entrega. Nadie ama más que el que da la vida por sus hermanos. El verdadero amor al prójimo, la verdadera caridad y entrega, se manifiestan en eso: en dar la propia vida. No sólo bienes materiales, sino la vida entera. Desde este punto de vista, uno de los mayores ejemplo de solidaridad y entrega en nuestros tiempos tal vez lo encontremos en la Madre Teresa de Calcuta, quien no conoció límite alguno para esa entrega personal a los necesitados.

¿Acaso no es obvio al ojo observador que la falta de solidaridad no conduce a otra cosa que al aletargamiento de la civilización y la falta de desarrollo conjunto de todos los hombres? La falta de solidaridad no sólo afecta a los necesitados, o a los países en desarrollo, o a los ignorantes. La falta de solidaridad se revierte en contra nuestra, y nos afecta tan directamente como a los más necesitados. Ser solidarios con los demás, podemos decir, es ser solidarios con nosotros mismos, pero de una manera genuina, legítima. Preocuparnos por nosotros y por los nuestros es lícito, pero no a costa de los demás, sino de la mano de los demás, colaborando con el desarrollo de todos.

La Placa de Nazca

La Placa de Nazca

La Placa de Nazca es una placa tectónica oceánica que se encuentra en el Océano Pacífico oriental, junto a la costa occidental de Sudamérica.

El borde oriental de la placa se encuentra en una zona de subducción bajo la Placa Sudamericana, lo que ha dado origen a la Cordillera de los Andes y a la Fosa Chileno-Peruana.

El límite austral de la Placa de Nazca es divergente con respecto a la Placa Antártica, al igual que el límite oriental con la Placa del Pacífico y en el norte con la Placa de Cocos.

Existen tres microplacas, específicamente en las zonas de unión entre las placas. La de las Islas Galápagos se encuentra en la unión de las de Nazca, del Pacífico y de Cocos. La de Juan Fernández en el borde entre la del Pacífico, la de Nazca y la Antártica, y la de Isla de Pascua en el límite entre Nazca y del Pacífico, un poco más al norte que la de Juan Fernández.

La zona de subducción que ocurre en las costas sudamericanas ha provocado que esta zona sea altamente activa sísmica y volcánicamente. Cabe destacar el Gran Terremoto de Valdivia de 1960, cuya magnitud superó los 9,5º en la escala de Richter, siendo el más fuerte registrado en la historia de la humanidad.

Decimos esto porque nuestro país el Perú se encuentra comprendido junto con otros países dentro de esta placa tectónica, más aún forma parte de todo el Cinturón Volcánico del planeta. Lima, la capital del Perú muy pocas veces a sido tocada por sismo alguno, casi siempre es al sur de ésta en donde las fuerzas subterraneas manifiestan movimiento. Este último 15 de agosto se hizo sentir la furia de la Tierra y alcanzó una magnitud de 7.7 en la escala de Ritcher y eso es mucho para Lima, ciudad muy antigua con muchos inmuebles que datan de la época colonial y como sabemos muy frágiles. Estos terremotos como el de hace algunos días se volverán a repetir en algunos años, tenemos que estar listos y preparados para poder afrontarlos.

 Fuente: Wikipedia  Enciclopedia virtual

La verdad ...existe?

La verdad ...existe?

"La verdad existe, sólo se inventa la mentira" (George Braque). Parece obvio, y experimentable cada día, que nuestros tiempos se caracterizan por la imposición del relativismo en nombre de la tolerancia. Ante una afirmación incómoda, la reacción suele ser la acusación de fundamentalista.

Por definición, la ética busca el bien y el bien se logra cuando se conoce y se respeta la verdad. Sólo pueden exisitir la verdad o "mi verdad" y cuando "mi verdad" no coincide con la verdad se trata de la mentira. A los hombres nos corresponde buscar con espíritu libre la verdad, no inventarla  o acomodarla.

Es por eso que no busquemos que los demás coincidan en un 100% con nosotros, no todos tenemos la misma concepción o apreciación sobre algo o sobre alguién. Antes de hablar pensemos un poco.

Individualismo atomista

Individualismo atomista

 Me han parecido muy interesantes unas ideas que he leido recientemente del filósofo canadiense Charles Taylor. Taylor afirma que uno de los males de la sociedad occidental actual es lo que denomina "individualismo atomista". Afirma que desde la Ilustración, las ciencias sociales se han centrado casi en exclusiva en el individuo como portador de la verdad y la dignidad.

De esta manera, el hombre es un individuo aislado que pacta, ya sea con otros individuos o con grupos, un contrato social en el que se ponen de acuerdo. La base de tal acuerdo es la deliberación y el consenso.

Tales ideas han hecho que se vaya perdiendo paulatinamente las dimensiones sociales e históricas de la verdad y de la personalidad humana. Taylor afirma que las teorias morales contemporáneas son abstractas y sin vida. No tienen raices y son esclavas del momento y del interés.

En su obra "La ética de la autenticidad" afirma: "Solamente si existo en un mundo en el que la historia, o las exigencias de la naturaleza, o las necesidades de los demás seres humanos, o los deberes propios del ciudadano, o la llamada de Dios, o alguna otra cosa de ese orden, tiene importancia crucial, puedo definir para mí mismo una identidad que no sea trivial".

Taylor afirmó hace años que hacer que sea el individuo el portador de la verdad y la moralidad, como afirmaba la Ilustración, llevaría a una pérdida de solidaridad y de cohesión social y esto haría que se extendieran el escepticismo y el relativismo moral.

El atomismo socava la naturaleza del hombre, que es eminentemente social. Para Taylor, la solución pasa por recuperar la comunidad familiar. Anima a tomar conciencia de que la propia identidad es recibida, que el hombre no está solo y que lo que es lo debe a la educación recibida en el hogar, que constituye un punto en el que convergen tradiciones, hombres y culturas.